miércoles, 14 de noviembre de 2018

Insomnio

Llevo más de media hora dando vueltas en una cama que ya se me queda chica, cuando curiosamente es más grande de lo necesario para lo que ocupa mi cuerpo. Me ha dado tiempo a imaginar miles de historias que nunca viviré, a recordar miles de momentos que ya viví y a no dejarme reflexionar sobre ciertos aspectos que no quiero pensar. 

He optado por abrir spotify y escribir sobre nada y sobre todo. Ahora suena una de esas canciones que son capaces de relajarme y que me evoca recuerdos de una historia que ya fue. Porque hace solo un par de años me sorprendían cuando escuchaba que hay personas que asocian recuerdos a canciones, ya que yo defendía que la asociación correcta era canciones a recuerdos.... nunca llegamos a un acuerdo... ahora tal vez admita que ambas opciones son ciertas. 

Las canciones me ayudan a pensar, a relajarme, a ser feliz, a terminar de romperme o a encontrar lo que quiero decir. No hay historia que no esté cantada, solo hay que saber rebuscar un poco en cada letra  para encontrar algo que parezca sacado de nuestra vida. Lo que me lleva a pensar que todos estamos irremediablemente condenados a vivir ciertas situaciones, no todas malas ni buenas, que nos ayuden a bailar lo que el destino nos presenta. 

En momentos así, me ayuda a sentirme menos sola o perdida... si otros han escrito y cantado lo que yo siento, si hay alguien que también se reconoce en un verso de una canción, el problema parece menos problema. Mi problema, dificultad o situación no es exclusiva y siempre puedo buscar otra canción que tenga la solución al problema, que me haga sonreir y querer moverme.