miércoles, 13 de marzo de 2013

Never Give Up

Porque las cosas duelen y duelen, porque no importa que pase el tiempo hay cosas que son incontrolables a nuestros sentimientos, porque podemos sentir felicidad o tristeza en momentos en los que nuestra racionalidad dice que no tendríamos porque reaccionar así, pero el caso es que lo hacemos y a lo último que solemos hacer caso es a nuestra razón. 

Es posible que lo que hoy nos provoca una sensación, mañana o con el paso del tiempo nos provoque la contraria o simplemente ninguna. Pero cuando estás feliz y de momento aparece algo que te cambie el humor  es imposible no querer que pase el tiempo para poder decir, hasta aquí. Aunque el verdadero problema reside en que no está en tu mano controlar que pasará, que sucederá y como reaccionará la gente. 

Así que me propondré escuchar a mi cabeza y no al primer golpe que sienta mi corazón, porque detrás de cada pequeño golpe hay algo que no deja profundizar y que me mantiene en pie, se llama esperanza, ilusión, sueños, alegrías, que están ahí y van a seguir estando. Porque si hay cosas que duelen también sé que hay cosas que me hacen mucho más feliz y eso es lo importante. Porque no hay charlas sinceras que no destruyan todos los demonios que una lleva por dentro. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario