jueves, 26 de abril de 2012

Caminando hacia ti

Me tienes enamorada, la tranquilidad que respiro a tu lado, la paz y sosiego que eres capaz de retransmitirme, las noches que has velado por mi y las lágrimas que me has visto derramar, hacen que te quiera. Simplemente siempre deseando poder escapar aunque sea un día, una semana o como ahora simplemente cuatro días contigo. 

Me encantas. Tienes todo lo que necesito para ser feliz. Miro hacia un lado y me gusta lo que veo, miro al otro y sigo viendo algo que me encanta. Respiro a libertad contigo, y al contrario de lo que pueda parecer por estar donde estás, siento que tengo más libertad que antes. Me das valor, me das el coraje que no tengo, siento que soy capaz de todo, de comerme el mundo si estoy ahí contigo, de lo que sea, de enfrentar al mundo entero por mí y mi felicidad, por mí y por lo que creo correcto y bien hecho. 

Ya queda nada para volver a encontrarnos y estar tú y yo. No importa que no esté sola, el mundo que me rodea realmente desaparece cuando estoy centrada en ti y en mi. Y no estoy segura de que esta vez pueda tener ese pequeño descanso del mundo para centrarme en ti, pero ojalá y me lo permitan, ojalá aunque sean solo cinco minutos ininterrumpidos, que lo hagan parecer una eternidad. Porque contigo mucho es poco.

En nada estaré contigo, Constantina, en nada estaré en casa de nuevo, en nada estaré pisando tu suelo. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario